Representa el poder cósmico del destino. Algo inesperado va a ocurrir, positivo o negativo, depende de la conducta del pasado. Lo que está destinado que ocurra no se puede evitar.
Representa la ley del karma, todo o que se siembra será cosechado, por eso es necesario tener las cuentas al día.
Trabajar sobre uno mismo para alcanzar el propio futuro.
Si se escuchan las Normas la vida cambiará radicalmente.
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