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TORREVIEJA Alquimistas del sabor

Published by Buscador under on 7:12


Una empresa da color y nuevos aromas a la sal de las Lagunas, la envasa en tubos de cristal y coloca su producción en aeropuertos de todo el país
Un proyecto madurado durante un año. Unos beneficios, destinados en parte a CEAFA (Confederación Española de Enfermos de Alzheimer). Un promotor, Tomás Ballester, que preside la asociación local torrevejense contra esta enfermedad (AFA).

Y un producto, sales aromatizadas. Con estos mimbres se está distribuyendo un producto único por todo el país a través de Aldeasa, empresa operadora de las tiendas libres de impuestos aeroportuarias y que pronto estará en los estantes de las gasolineras de la cadena de Cepsa o en las del Corte Inglés.


Tomás Ballester, al frente de una nave de 350 metros cuadrados y cuatro operarios, uno senegalés, otro colombiano y dos españoles, considera "factible" facturar a lo largo de este año 90.000 euros con la comercialización de sal aromatizada, de los cuales, al menos veinticinco mil, serán donados a CEAFA. Los cuatro trabajadores de esta empresa, a quienes acompaña en ocasiones su fundador, manipulan con habilidad la sal fina y la gruesa, realizando manualmente las labores de mezcla y envasado, utilizando probetas y medidas. "Como en farmacia podemos trabajar por gramos o por volúmenes", comenta Ballester echando mano de su formación profesional. Hasta la fecha, ocho toneladas de sal marina de Torrevieja han sido ya aromatizadas bajo la denominación comercial de "Sal de los Lagos Rosas", en alusión al intenso tono rosáceo que caracteriza a las lagunas en los periodos de cristalización.

Proceso


Este nuevo proceso de elaboración añade a las propiedades naturales de este producto local, especias que potencian su sabor y se adaptan a los aromas de diversas culturas culinarias. Diversifica y aporta por primera vez un valor claro al producto por el que se reconoce a Torrevieja en todo el mundo, más por su distribución a granel, en grandes cantidades, para seguir la senda de otras "sales" como las de la Camarga francesa o las hipercitadas "escamas" de sal Maldon inglesas.

En principio esta empresa ha puesto en el mercado, además de la típica sal marina de mesa, otras cinco variedades, aromatizadas con hibisco, hierbas provenzales, curry, especias de Kebab y a las tres pimientas. Son "sabores normales para británicos y españoles", comenta Ballester, quien tiene previsto sacar al mercado a corto plazo, una sal baja en potasio, para hipertensos, o dietética aromatizada que no existe en el mercado.

Además de otra variedad destinada al mundo árabe y muy utilizada en la Fiesta del Cordero, "aunque la combinación de la sal común puede abarcar hasta 300 sabores, por lo que no vamos a parar aquí, renovaremos las ideas", asevera este empresario convertido en alquimista de los sabores. El creador y comercializador de este nuevo producto basado en la sal, tan unida a la historia de Torrevieja, afirma que la idea de montar esta empresa solidaria se le ocurrió paradójicamente cuando en un viaje visitó unas salinas en Senegal y posteriormente le ofrecieron en un restaurante de Madrid sal aromatizada que no acabó de convencerle.


Sobre las dificultades de poner en marcha una fábrica, aunque de pequeñas dimensiones, y en tiempos de crisis, este farmacéutico cree que los tiempos para este tipo de negocios pasan por "un momento interesante ahora que todo el mundo habla de cocina, pese a que los supermercados reducen sus referencias". A la hora de hablar de la inversión realizada Ballester sonríe y se va por las ramas: "Lo que más me ha costado son las noches que he pasado sin dormir madurando el proyecto, y después gestionar los permisos de Industria, Sanidad, Alimentación y, por supuesto, los municipales".




Apoyo institucional


El Ayuntamiento apoya plenamente esta iniciativa con el logotipo "Torrevieja Solidaria" y el escudo de la ciudad. Además ha encargado a "Sal de los Lagos Rosas", (www.saldeloslagosrosas.com) un estuche especial de sus productos para usarlos como regalo institucional.


Como el que entregó el alcalde Pedro Hernández al presidente Camps en la última Feria de Turismo de Valencia. Ballester, sobre quien ha recaído en tres ocasiones el premio Diego Ramírez Pastor, galardón que otorga Torrevieja a las personas altruistas, es dado a las anécdotas y comenta cómo se dirigió a los responsables de un programa culinario de una cadena de televisión para indicarles que estaban cocinando con sal de Torrevieja, "desde entonces los presentadores cada vez que usan la sal nombran a Torrevieja".

M. PAMIES ANDREU

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