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«Creo en la videncia, pero no en el vidente»Iker Jiménez:

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Vuelven las historias inexplicables, las imágenes confusas y los sonidos que nadie sabe de dónde proceden... Regresa Iker Jiménez (Vitoria, 1973) y su 'Cuarto Milenio'. Reaparece Cuatro, y lo hace con su nave del misterio -así llama al plató- renovada.

- Ha cambiado la imagen de su nave del misterio, ¿a qué se debe el nuevo look?


- Principalmente he cambiado la imagen porque necesitaba que fuera un espacio más íntimo, más parecido al despacho de mi casa. Lo he llenado de libros que tenía en mi biblioteca. Me siento más cómodo en un plató a mi gusto.

- ¿Adónde nos traslada su nave del misterio en el primer programa?

- Tenemos preparada una gran sorpresa. Vamos hasta el pueblo abandonado de Belchite (Zaragoza). Un lugar que fue destruido durante la Guerra Civil y donde hemos pasado varias noches. Sinceramente, nunca me habían ocurrido las experiencias que allí se han dado...

- ¿Qué le ha ocurrido?

- A través de grabaciones de audio, hemos oído voces de niños, sonidos de aviones y de las bombas que allí cayeron durante la guerra. Era todo muy real, con mucha claridad.

- ¿Jamás le había sobrecogido tanto un lugar?

- Nunca. Y eso que he estado en muchos sitios. En Belchite, hemos hecho una prueba nueva, que era la experiencia de aislamiento. Un compañero se quedó solo en la ermita abandonada del pueblo para que oyera los sonidos de forma natural, no a través de grabaciones. Pasó mucho miedo porque oyó la voz de un niño que pronunciaba su nombre.

- ¿Qué debe tener un lugar para que ocurran estos fenómenos?

- Si soy sincero, no lo sé. No hay una teoría fija para determinar por qué en ciertos lugares ocurren estos fenómenos. Pero, normalmente, ocurren en lugares donde se ha producido una tragedia. Por ejemplo, en Belchite murieron más de 13.000 personas.

- ¿Y por qué las voces suelen ser de niños?

- Pues es muy curioso, pero desde la prehistoria los humanos hemos tenido siempre una preocupación: no morir antes de tiempo. Supongo que esos niños necesitan expresarse. Transmitir lo que no les dio tiempo durante su corta vida.

- ¿Cree a los médium, como Anne Germain de Telecinco, que hablan con tanta facilidad con el más allá?

- Tengo una idea muy mía al respecto. Yo creo en la videncia, pero no en el vidente. Es decir, una madre puede sentir que su hijo se muere a mil kilómetros de distancia, pero me cuesta pensar que una persona tenga el don de hablar cuando quiera con el más allá.

- ¿Hay muchos fraudes en este mundo?

- Hay menos fraudes de lo que parece. Ocurre que, a veces, la gente cree oír, o ver cosas y está confundida, la realidad no es la que parecía, pero no engañan con intención, sino por error.

DAVID DE LA CRUZ
/ocio.elnortedecastilla.es/

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