Cuando el amor daña los sentimientos de la pareja
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Según la Organización Mundial de la Salud, la depresión es un
trastorno mental frecuente, que se caracteriza por tristeza, pérdida de
interés o placer, sentimientos de culpa o falta de autoestima,
trastornos del sueño o del apetito, sensación de cansancio y falta de
concentración. Esto puede ser crónico o recurrente, afectando el desempeño de la persona en su vida cotidiana.
¿De qué manera este estado emocional afecta a la relación de pareja?
Una de las consecuencias más visibles en la persona deprimida es el
problema de la comunicación, pues dificulta la dinámica familiar y la
convivencia en sí con su entorno más cercano.
El temor de sentirse incomprendido, de no saber explicar qué es lo que le ocurre o que la familia no le entienda, lleva al deprimido a guardar silencio pensando que si se dan cuenta de su pena, tristeza o dolor, se alejarán.
Esa actitud generará conflictos, pues la familia tampoco comprenderá
qué es lo que está sucediendo en esos momentos por la mente del
afectado.
¿Cómo saber si una persona está deprimida?
- La tristeza es constante,
dura más de tres meses, tienes el deseo de llorar o lloras
constantemente. Puede ser que de tanto llorar ya no tienes lágrimas.
- No te dan ganas de hacer las cosas que antes disfrutabas. Ahora casi nada te interesa.
- Te ves a ti misma como una persona sin valor o sin importancia.
- Estás desesperada, nerviosa o muy preocupada sin que necesariamente exista alguna razón.
- Sientes que los problemas te abruman y no te sientes capaz de solucionarlos.
- Tu apetito ha variado, puedes tener demasiadas ganas de comer o por el contrario, no tienes gusto por los alimentos.
- El sueño está alterado. No te puedes levantar de la cama o tu sueño es inquieto y no puedes dormir en la noche.
- Te sientes cansada todo el día, incluso te despiertas cansada.
- Estás renegona y molesta la mayor parte del día.
- Piensas que ya no vale la pena vivir o has pensado en quitarte la vida
Una de las causas de la depresión es la falta de afecto, y esto puede darse a cualquier edad y en cualquier circunstancia. La indiferencia de la sociedad actual, el
maltrato dentro de la relación de pareja, el abandono a temprana edad
por uno de los progenitores, y más tarde por la pareja, agudizan la
carencia afectiva.
Cuando al interior de la familia uno
de los dos presenta un cuadro de depresión es importante tomar en cuenta
que eso no significa que es una persona débil o que está loca. El
estar triste por una pérdida es normal, pero si esta tristeza continúa
después de seis meses o un año, puede tratarse de una depresión. En ese caso será necesaria la ayuda de un profesional en salud mental.
Qué se necesita para mejorar?
-
No esperes cambiar todo de una sola vez. Cuando sepas por dónde
empezar, puedes ir seleccionando qué cambios se pueden ir dando en tu
vida.
- Puedes ir haciendo progresivamente las cosas sobre las que tienes control y dependen de tus decisiones.
-
No te sientas mal si ves que hay situaciones que no dependen de ti.
Muchas veces esto puede desanimarte y pensar que no puedes cambiar.
-
No todo depende de medios económicos y de tiempo. Si miramos a nuestro
alrededor, encontraremos que podemos delegar tareas y esfuerzos a
nuestros familiares, que podemos darnos un tiempo para compartir las
tareas con la pareja y los hijos.
- Es mejor no tener expectativas
tan altas que no se puedan cumplir; esto puede generar frustración.
Alegrémonos de nuestros pequeños logros.
El tema de la
depresión no debe ser tomado a la ligera, pues este es como un rayo
silencioso que horada el estado anímico y afecta la forma de sentir y
disfrutar de las cosas bellas de la vida.
Es importante
estar alertas ante la primera señal de depresión e identificar cuáles
son las razones que la provocan. A veces puede darse por una situación
pasajera, y ante la pronta solución, desaparecer; pero cuando esta se
agudiza, se vuelve frecuente, y si la persona deprimida no hace nada por
solucionar su problema, será necesario buscar la ayuda de la familia y
de un profesional especializado que le devuelva las ganas de vivir.
Fuente: Movimiento Manuela Ramos
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