Mono de fuego: el signo de la reconciliación

Mono de fuego: el signo de la reconciliación


    Suerte. A equilibrar el karma

    Para el horóscopo chino, el 2016 es un año donde la paz y la armonía deben ser dos de las metas ideales
 Borrón y cuenta nueva. Es un dicho que algunos toman como filosofía para despedir al año y dar la bienvenida a uno nuevo con energía renovada. De cara a 2016, la astrología china muestra sus cartas para brindar opciones de reconciliación personal, espiritual y física, asegura la argentina Ludovica Squirru Dari, reconocida astróloga que puntualiza la importancia de analizar las opciones que propone el año del Mono de Fuego.


Squirre Dari explica que creer o no en la astrología es una decisión personal, pero al final de cuentas lo que se busca en esta guía, publicada en su más reciente libro “Horóscopo Chino 2016”, es encaminar a la mente es un proceso de limpieza emocional, a un nivel de conciencia para hacer de nuestra decisiones las mejores del año en los aspectos laborales, familiares, sociales y sobre todo, personales.

El significado

Ludovica Squirru destaca que cada ciclo está regido por un animal que representa valores, fortalezas, decisiones y oportunidades. En el caso del mono de fuego, la astróloga asegura que significa combate desde una perspectiva de canalización, de ir contra la corriente de lo negativo y las adversidades, de las guerras y el egoísmo.

“El año del mono viene con un espíritu de tomar decisiones, es un signo de energía fuerte. Para los chinos, el mono de fuego significa incendio, pero también porque trae la luz sagrada, iluminación. Todo tiene que ver cómo te preparas, en la astrología no hay cambios mágicos, hay una conciencia que debemos adquirir en épocas de una gran oscuridad (…) Nadie te va a solucionar la vida si no haces algo por ti mismo”.

Encuentros profundos Squirru Dari asegura que hablar de astrología no implica cambios mágicos que resuelvan al instante los conflictos personales y sociales del entorno del cada individuo, pues en el caso de las astrología china ésta se enfoca en una manera más preventiva que predictiva.

“Cada ser humano tiene que hacerse responsable del karma que genera todos los días de su vida. No es que cambie el calendario mágicamente del 31 de diciembre al 1 de enero para que tengamos un golpe de suerte. El mundo está dando vueltas por nuestra culpa, no de los astros. Los seres humanos estamos produciendo un mundo muy caótico, conflictivo, estamos en el umbral de una tercera guerra mundial”.

La experta rgumenta que el horóscopo chino no se trata de decir qué saldrá bien y que mal a lo largo del año, pues esta filosofía se nutre de otros conocimientos que abren un sendero a la exploración emocional personal y colectiva. Ofrece “técnicas para estar mucho mejor con respeto a problemas y traumas que uno trae desde hace tiempo y creemos que no se pueden modificar o cambiarlos”.

Empezar de cero

Ludovica Squirri expresa que uno de los pasos más importantes para comenzar un año o ciclo nuevo es dejar atrás problemáticas que estresan y no permiten avanzar, desde los aspectos más sencillos o complejos como reconciliarse con alguien aun así la relación no vuelva a ser la misma de antes y hasta liberarse de deudas económicas por más pequeñas que sean.

“Hay que tratar de pacificar esa guerra interna que tenemos a través de todas las técnicas que podamos practicar, no hay una mejor que otra, no importa si te gusta la meditación, yoga, la medicina núbica, lo que sea, lo importante es hacerlo. En esta búsqueda no hay que convencer a nadie”.

Añade que pese a los escombros que han quedado de enfrentamientos personales pasados, otro punto que ayuda es siempre tratar de mirar y encontrar lo positivo de cada situación y no limitarse a dar lo mejor de sí a cada persona y entorno. “El verbo más difícil de conjugar es aceptar y cuando aceptas ya cambia algo. Es el primer paso y ese es el mensaje”.
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