Conjuros breves para la salud

Si desea mejorar su propia salud o pedir por la de un familiar, le mostramos tres procedimientos mágicos sencillos, pero no por eso menos eficaces.
Una fórmula para dormir tranquilo, un baño energético con la ayuda de una flor y el poder de la luz de seis velas para que alguien enfermo se mejore a la brevedad. Adelante, practique el ritual que necesite y encuentre una sencilla solución a diferentes problemas de salud y malestar.


ANTI-INSOMNIO
La falta de descanso y la imposibilidad de dormir hacen que nuestro ánimo y nuestro físico se vean resentidos, más susceptibles y, además, que disminuya nuestro nivel de rendimiento en el trabajo o con las relaciones afectivas. Para combatir el insomnio, sólo deberá salpicar su almohada con gotas de esencia de lavanda y encender, esa misma noche, una vela celeste en la que habrá escrito su nombre con algún elemento punzante, rodeado de una nube. Además, antes de acostarse, beba una infusión de valeriana y ¡dulces sueños!
BAÑO DE LIRIO
Si tiene bañera, compre un lirio blanco y ubíquelo sobre el agua tibia. Déjelo flotar pensando en que el perfume de la flor le otorgará fuerza y vitalidad. Luego de cinco minutos, entre en el agua y piense que usted se cargará de vibraciones positivas; por eso será necesario que medite dentro de la bañera y pida lo que desea en cuestiones de salud. Utilice incienso de sándalo y una vela rosada. Si practicará el ritual en una ducha, puede ir deshojando el lirio para que su cuerpo reciba toda esta energía sanadora. Recuerde que será importante hacer esto en momentos de mucha armonía, para que dé buenos resultados.
PARA PEDIR POR UN ENFERMO
Forme un círculo con seis velas blancas. En el centro, ponga unas hojas de laurel, un conito de incienso de sándalo y un papel con el nombre del enfermo. Encienda las velas una por una, mientras repite internamente el nombre del enfermo. Luego, a la luz de las velas, recite: “Que la salud de [nombre de la persona enferma] mejore; escucha mis palabras y mi ruego, libéralo/a de su enfermedad”. Cuando el incienso se hay consumido, apague las velas. Repita a la semana siguiente.
Nota: antes de comenzar cada uno de los procedimientos mágicos anteriores, le recomendamos que se prepare espiritualmente. Para ello usted puede rezar una oración tranquilizadora e invocar, si lo cree necesario, a su ángel guardián o un santo protector.
Fuente revista Predicciones