¿En qué consiste el tarot celta? Paloma Torres

El tarot celta tiene su origen en los pueblos que existieron nada menos que en la edad del Hierro, en el siglo V antes de Cristo. Entre ellos los había provenientes de Escocia, Gales, Irlanda, Francia y España. Eran un conjunto de pueblos muy diferentes pero que tenían una cultura más o menos homogénea basada en sus leyendas, druidas y la relación con la naturaleza.

Los celtas eran animistas, es decir, en su cultura se atribuía cualidades y alma a objetos cotidianos y a entidades naturales. De esta forma, eran considerados poco menos que dioses.
Aunque no existen pruebas físicas de que por aquel entonces usaran un tarot tal y como lo entendemos ahora, pero si que es verdad que podemos tener en nuestras manos un tarot basado en sus creencias.
En el tarot celta existen 22 arcanos mayores, que representan a los dioses y que reciben sus nombres en idioma gaélico. Estas cartas se dividen en cinco ciclos: el mitológico, heroico, histórico, oceánico y aventurero.
No podemos olvidar que los celtas veneraban la naturaleza y tenían fama de saber como interpretarla. Además, tenían muchos conocimientos acerca de ciencias como la astronomía y la astrología. De hecho, es muy conocido el horóscopo celta.

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